Las gentes de un pueblo del desierto tenían una enfermedad contagiosa que cada día perdían fuerzas y llego un día que no podían más. Se reunieron todos para pensar una solución rápida porque no podían trabajar ni hacer nada.
Eligieron a dos hombres para que fueran a buscar una solución. Los dos se fueron a una ciudad cercana y preguntaron a la gente por una solución. Un sabio les habló de unas hierbas que podrían encontrar en un oasis que eran corteza de árbol vital y moco de gusarago; lo tenían que mezclar en un caldero con agua y se lo tenían que tomar por la noche un vaso cada uno.
Los dos hombres fueron al oasis e hicieron lo que les dijo el sabio, por la mañana tenían mucha fuerza.Regresaron al pueblo y dieron de beber un vaso con la mezcla a todos los del pueblo. Por la mañana tenían tanta fuerza que podían levantar rocas muy grandes. Nunca más se les acabó la fuerza.
4 comentarios:
Es muy chulo y a la vez raro pero muy bonito y habla de la generosidad es genial.
Es bonita y muy intrigante muy bien pablo
Espero que os guste
ME HA GUSTADO MUCHO. TIENES MUCHA IMAGINACION.
Publicar un comentario