Choan: El monstruo del Fondo

Me cuenta mi Yayo Ángel que en la Val de la Figuera existió un monstruo de grandes dimensiones llamado “Lo Gatalí”. Era como dos pisos juntos de alto y pesaba tres toneladas. Esta Bestia inmunda era una mezcla entre un gato montes y un jabalí. Tenía el pelo de color lila y era muy puntiagudo. En la nariz poseía una especie de anillo gigante con el que rompía todo lo que quería. Era muy feroz.

La leyenda dice que era una mutación conseguida en un laboratorio por un científico Chiflado llamado Elbruden Galinov que mezcló los genes de ambos animales.

Protegía a la gente de Fabara de sus enemigos, forajidos, malhechores, ladrones, invasores, señores feudales y otras gentes malas. Los Fabaroles, como recompensa, le daban comida para que no tuviera que trabajar después de los combates. También le construyeron un refugio secreto en una gran cueva en lo más hondo de la Val, llamada la “Cueva de la Melsa”.

En estos momentos esta cueva esta inundada por el embalse de Mequinenza y ahora está inundado por el agua del río Ebro. Cuentan que el monstruo todavía existe, eso es lo que cuentan algunos pescadores que lo han visto nadando por el agua.

Luis: Descripción del Parque

Desde la plaza de la iglesia puedo contemplar el parque, está situado a la orilla del río Matarraña y al lado de las piscinas municipales.

En esta época del año los árboles del parque están sin hojas y las pocas que quedan tienen tonos marrones, excepto los cipreses que son de hoja perenne. Algunas zonas del césped están cubiertas de hojas por lo que su color es verde y marrón.

Se pueden ver algunos columpios, la rueda que se utilizaba para moler las aceitunas, el escenario donde en actos festivos actúan grupos musicales y teatrales y la fuente de piedra por su parte trasera; también hoy se pueden ver niños jugando y gente paseando.

Desde este lugar se oye la cascada del salto de agua”Lo Salt “, el piar de los pájaros, el sonido del viento y el ruido de los coches que pasan por la carretera.

En el momento que estoy observando el parque se percibe el olor del humo que desprenden los rastrojos que están quemando en un huerto.

Hoy hace viento por lo que las ramas de los árboles se mueven y a mí me produce una frescura intensa.

Elena: Entrevista a mi hermano Eduardo

1-¿Cuántos años tienes?
-8
2-¿Cuáles son tus aficiones?
-Jugar a la “DS”, al ordenador y el fútbol
3-¿Te gusta estudiar?
-Sí
4-¿Qué quieres ser de mayor?
-Futbolista
5-¿Cuál es tu equipo favorito y los futbolistas que más te gusten?
-Mi equipo favorito es el Real Madrid, y mis futbolistas favoritos son: Cristiano Ronaldo, Kaka, David Villa y Fernando Torres y de portero Casillas.
6-¿Cuál sería tu mejor regalo?
-Ver el partido Madrid-Barcelona en el Santiago Bernabeu y también ir al zoo.
7-¿Te gustan otros deportes a parte del fútbol?
-Sí, el béisbol, jockey y balonmano
8-¿Cuál es tu comida preferida?
-Los helados, la pizza y los macarrones
9-¿Qué programas de televisión te gustan más?
-Sin Chan y Los Simpsons
10-¿Estás contento por hacer la primera comunión?
-Sí, tengo muchas ganas

Luis: El planeta de los Catapumchispum

Ayer al despertar recordé el sueño que tuve la pasada noche. Mis amigos y yo nos montamos en una nave espacial, la pusimos en marcha y nos dirigimos al planeta “Catapumchispum”. Aterrizamos en un girasol gigante, descendimos y nos estaban esperando los “Catapumchispum”. Eran alegres, tenían cuatro ojos, su nariz tenía forma de patata y su boca era muy grande; su color de piel era como el arco iris. Los “Catapumchispum” nos llevaron a ver su planeta sus casas tenían forma de coches, champiñones y la que me hizo mas gracia tenía forma de cacahuete. Comían platos muy raros con gusanos, hierba, hongos y otras cosas raras. Aprendimos todas sus costumbres y antes de zarpar en la nave nos hicimos una foto todos juntos de recuerdo para no olvidar a los “Catapumchispum”.

Paula: ¿Cómo es el Sistema Solar?

Hola mi nombre es Paula y hace poco inventé una máquina llamada TEI que significa “transportador espacial inmediato”. He hecho pocos viajes, aunque todos apasionantes; en realidad a mí me gustaría hablar de uno que hice a la vía Láctea.

La verdad es que no sabía como funcionaban algunos botones, así que pulsé lo normal para ir a sitios como París, Escocia, etc, aunque no sirvió y aparecí en un sitio muy raro todo de color negro. Me monté otra vez en la TEI y en vez de poner planetas puse “placetas” y aparecí en una plaza enorme. Después de un rato conseguí programar la TEI y comenzó mi viaje a la vía Láctea. Primero fui a Marte y…

En Marte, todo era muy raro aunque bonito, una gente muy extraña y de color verde amarillento me dio la bienvenida, uno de ellos me dijo que allí se alimentaban de piedras y me dio a probar, pero rechacé la oferta.

Después de pasar un tiempo en Marte me fui a Júpiter, estaba desierto, pero no puedo negar que vi una cosa extraña y que me llamó la atención, era un animal muy peludo que todo el rato decía lo mismo:

- Adiós, adiós, adiós… - aunque nunca se iba.

Después de esa experiencia me acerqué a Saturno y la verdad es el planeta que más me gustó por sus anillas, también lo grande y rocoso que era. Urano también tenía anillas pero más pequeñas, lo que me llamó la atención es que lo único que vi allí fue un pequeño charco de agua.

Si soy sincera cundo fui a Neptuno pensé que estaba el rey de los mares pero solo encontré a un niño de apariencia humana que decía que era un príncipe, me hice su amiga pero me tuve que ir.

Visité Plutón y era muy pequeño tanto que en unas horas podías recorrerte el planeta entero andando, allí encontré tierra que brillaba y que era muy bonita.Cuando intenté visitar Eris y Ceres por mala suerte no pude. En Mercurio lo que me pasó es que no estuve mucho rato, porque hacía mucho calor.

Y por último visité Venus, allí se me acercó una tribu de gente muy rara que me dijeron que en Venus todos los días eran viernes. Para terminar mi viaje me monté en la TEI y regresé a la tierra al primer intento.

María C: Los animales del espacio

En la Nasa mandaron a un hombre a la luna, o eso es lo que intentaron porque esa nave se desvió de su trayectoria y terminó en un planeta muy extraño que aún no se había descubierto. Aquel hombre se llamaba Mikel y recogió una planta para escanearla pero resultó que era de una composición desconocida. Pocos momentos después se le acabo el oxigeno pero podía respirar sin dificultad porque aquel planeta tenía atmósfera y agua, todo lo necesario para poder sobrevivir allí.

Al cabo de unos momentos encontró un hermoso poblado. Las casas estaban hechas de flores y hojas. De esas especies de casas salían unos extraños seres que se parecían a los animales terrestres. Esos seres le contaron que todo el planeta estaba formado por su raza.

Él les preguntó si su planeta tenia un nombre y ellos le respondieron que aún no. Mikel les propuso un nombre que era Animalis (animales en latín) ellos le respondieron que les parecía un nombre precioso. Le enseñaron sus costumbres, sus tradiciones y también sus alimentos. Esa noche el se quedó a dormir allí. Al día siguiente volvió a la tierra y trajo unos hermosos dibujos que le dieron sus amigos del planeta Animalis. Por supuesto no dio las coordenadas para que sus queridos amigos pudieran vivir en paz.

Alejandro: Solos en la ciudad

Había una vez dos niños llamados Iván y Sergio que vivían en Caspe. Un día hubo una explosión nuclear y entonces los únicos supervivientes de la ciudad fueron ellos, porque en ese mismo día se fueron a pescar.

Cuando volvieron, como en la ciudad habían muerto todos, se oía un silencio sepulcral. Pero la sorpresa se la llevaron cuando se adentraron en la ciudad viendo los cadáveres de todas las personas que vivían allí.

-Voy a buscar un saco y una pala para recoger todo-. Dijo Sergio.

Cuando recogieron aquella parte se fueron a dar una vuelta por toda la ciudad a ver si había más cadáveres. Encontraron muchos y los recogieron todos. Luego hicieron una lista en la que había que hacer para poder sobrevivir. Tardaron poco rato. Al final Iván acabó de hacer la lista.

-Yo he propuesto: comer lo suficientemente sano cada día, no atiborrarse de chuches, dormir lo suficiente y ducharse al menos cada tres días.

Así lo hicieron. Pero ¿queréis saber donde dejaron los cadáveres Iván y Sergio? Fue al lado del cementerio.

Como en su ciudad había una sala de ordenadores fueron a jugar un rato. Iván se fijó en una puerta en la que ponía <> y sólo podía entrar el dependiente de la sala, pero como no había nadie entraron a ver qué había.

Iván abrió la puerta y allí encontró solo una caja. Cuando abrió esa caja se quedó boquiabierto. Su amigo Sergio acudió rápido y también se quedó alucinado. Estaban contemplando el único frasco de vidrio en el que en su interior había un líquido que curaba desde el resfriado hasta la muerte. Era el famoso frasco que vieron por la tele. Entonces pensaron lo qué podían hacer con ese frasco.

- ¡Rápido, vamos a buscar el saco lleno de cadáveres! - Exclamó Sergio.
- Está en el cementerio- Dijo Iván.

Cuando llegaron al cementerio sacaron rápidamente el frasco y a los cadáveres del saco. Luego les fueron abriendo la boca y les dieron el líquido. Toda la ciudad renació. Al día siguiente, Iván y Sergio salieron por la tele y se hicieron famosos.

Choan: La batalla por el gran botín

Alrededor del siglo XVII Jimson Winston había un inglés un poco chiflado cuyo sueño era tener un barco y una tripulación con la que adueñarse del mundo. En el año 1634 Winston emprendió un viaje lleno de misterio, aventura y emoción, ese viaje llevaba a cabo robar al los españoles el botín más grande de Europa. Los españoles, por su parte, tuvieron que luchar para que los tripulantes de la Baoding 1985 no se llevaran ese tan preciado botín, alunas voces decían que era mágico y otros que estaban un poco idos de la cabeza. ¿Para que lo querían sino era para comprar ron? en fin, que me enrollo mucho y si no no termino así que voy a continuar. Esa batalla duro una década, muchos españoles se aliaron con Winston para poder beber mucho ron, que para eso lo querían, al fin la batalla terminó y la victoria por el lado de Winston. Winston tenía muy pero que muy claro que quería hacer con el botín, lo único que llevaba en la cabeza en esos momentos era beber ron, así que con el botín lo que hizo fue eso comprar millones de billones de botellas de ron.

Pablo: La Bebida Mágica

Las gentes de un pueblo del desierto tenían una enfermedad contagiosa que cada día perdían fuerzas y llego un día que no podían más. Se reunieron todos para pensar una solución rápida porque no podían trabajar ni hacer nada.

Eligieron a dos hombres para que fueran a buscar una solución. Los dos se fueron a una ciudad cercana y preguntaron a la gente por una solución. Un sabio les habló de unas hierbas que podrían encontrar en un oasis que eran corteza de árbol vital y moco de gusarago; lo tenían que mezclar en un caldero con agua y se lo tenían que tomar por la noche un vaso cada uno.

Los dos hombres fueron al oasis e hicieron lo que les dijo el sabio, por la mañana tenían mucha fuerza.Regresaron al pueblo y dieron de beber un vaso con la mezcla a todos los del pueblo. Por la mañana tenían tanta fuerza que podían levantar rocas muy grandes. Nunca más se les acabó la fuerza.

Paula: El Barco Mágico

Había una vez dos piratas muy pobres que buscaban un barco abandonado, en buen estado y bonito. Un día cualquiera fueron en busca de barcos pero solo encontraron uno, en una isla desierta, nadie lo vigilaba, para ellos era muy feo y muy sucio, aunque las apariencias engañan. Estuvieron pensando un rato y al final se lo llevaron, aunque no les convencía mucho.

A los pocos días uno de los piratas le dijo al otro:

- A mí me parece que este barco va muy lento.

Y al cabo de poco rato el barco cada vez iba más deprisa, los piratas se quedaron confusos pero creyeron que estaban soñando; al cabo del rato el otro pirata dijo:

- Pues a mí me gustaría poder ir a Londres ahora mismo.

El barco se empezó a hundir, los dos piratas no sabían que pasaba y empezaron a tirar carga al mar, aunque el barco se seguía hundiendo. Llegó un momento en que el barco se hundió, los piratas cogieron aire pero a los 10 segundos estaban en un puerto de Londres.
Al llegar allí un hombre viejo y con muy buenas pintas se les acercó y les dijo:

- Gracias, gracias por haberlo encontrado.

Uno de los piratas lo apartó de un empujón y el hombre les explicó que ese barco era suyo y que lo perdió en un viaje. Los piratas se quedaron boquiabiertos y aún más cuando el hombre les dijo que era un barco mágico que le decías cualquier cosa y la hacía.Entonces el hombre les ofreció una recompensa de mucho dinero, los piratas se lo dieron, se compraron otro nuevo y nunca más volvieron a ser pobres.

Elena: Contaminación

Estos eran dos conejos que vivían en la ciudad. Una niña siempre se encargaba de ellos, les daba de comer, les cuidaba…, pero luego, por las noches, los conejos se tenían que ir solos a dormir porque la niña no se los podía llevar a casa. Un día los conejos se hartaron de toda la contaminación de la ciudad, del humo de los coches, las fábricas…Uno de ellos le dijo al otro que por qué no se iban al campo con los demás conejos. Primero dijo que no por su dueña, pero luego aceptó y se fueron juntos.

Allí en el campo hicieron muchos amigos tenían mucha comida, y lo más importante, no había nada de humos y mucho menos contaminación. La niña estaba muy triste porque no estaba con sus conejos y pensaba qué les habría podido pasar. Un día su madre la mandó a casa de la abuela que vivía en el campo a llevarle unas cosas y se encontró con los conejos. Les preguntó por qué se habían ido y ellos se lo explicaron, la niña les comprendió y desde ese momento siempre fue a visitarlos al campo y a jugar con los demás animales divirtiéndose mucho.

Luis: El viaje de la máscara.

Un mes de noviembre de 1994, el explorador Luís Carví emprendió un largo viaje por Indonesia, quería recorrer todas sus islas. Visitó Sumatra, donde años más tarde hubo un terrible tsunami, de allí se traslado a la isla de Java, después a Bali y aprendió bailes populares. También visitó Sulawesi y convivió con la tribu “tojara “. Finalizó su viaje en la isla de Lombok allí se encapricho de una máscara que fabricaba un hombre en un poblado y quiso conseguir por lo menos una y le preguntó:

- Me puedes vender una máscara- le dijo.
- Sí, le contestó el hombre. Y así siempre recordó la magia de aquella isla.

María C: La Pulsera Mágica

Juana fue a comprar y en casa cuando saco la compra se encontró en la bolsa una pulsera muy bonita, que ella no había comprado y decidió poner carteles pero nadie la reclamaba y se dijo:

-Como nadie la reclama me la quedaré. Pero antes la voy a limpiar.

La limpió hasta que quedó brillante y cuando se la puso se dio cuenta que tenia más energía. Un día vio que había fuego y se fue corriendo. Rescató a toda la gente y apagó las llamas. Después todas las personas se fueron a su casa, porque ella ya se había ido volando y se dedicó a rescatar a la gente. Pero un día se encontró con una niña que estaba llorando en la calle y le preguntó:

-¿Qué te pasa niñita? No llores que yo te ayudaré.
-Es que los niños me pegan y las niñas me insultan porque mis papas se han muerto,-le dijo la niña.

Y entonces Juana le dijo:

-¿Te gustaría que yo fuera tu mamá?
-Sí que me gustaría.

Y Juana le dijo:

-Y cuando seas mayor te daré mi secreto de los superpoderes.
-¿Ah si?
-Sí –dijo Juana-Pero no se lo digas a nadie. ¿Vale?
-Vale.

Al cabo de 15 años la niña heredó la ansiada pulsera que pasó de generación en generación para toda la familia.

Víctor: Papá Noel y un reno muy malo

Hace quinientos años Papa Noel se compró un reno muy malo, no quería ir por todo el mundo repartiendo juguetes. Quiso venderlo pero nadie lo quería. Papa Noel no sabía que era un caballo. Un día cuando lo lavó los cuernos se le cayeron y la pintura marrón también. Papa Noel lo denunció y se compró uno de verdad. Y así pudo repartir los regalos.

María A: La estrella rota

Érase una vez tres niños que estaban jugando en la plaza. Todo el mundo les avisaba que no lo hicieran porque sino romperían la estrella del árbol de Navidad, que con los años ya estaba un poco rota. Al cabo de unos días jugando al fútbol sin querer, rompieron la estrella. Pensaron qué podían hacer para que nadie se enterara y los castigaran.

Se les ocurrió esconderla pero uno de ellos dijo que si la escondían los reyes magos no encontrarían el camino para llegar al pueblo. Otro dijo que hicieran señales de humo para que encontraran el camino, y el otro niño dijo que la escondieran y que nadie se daría cuenta. Se fueron cada uno a su casa.

Cuando estaban durmiendo tuvieron muchas pesadillas. Entre todos acordaron ir al ayuntamiento y decir lo que había pasado, y así lo hicieron.
El día de reyes fueron a la plaza y fueron los únicos niños que tuvieron carbón, pero cuando llegaron a casa tenían los juguetes que habían pedido.